domingo, 10 de julio de 2016

¿ANGUSTIA?

Sin ningún presidente de América del Sur y ante el rey Juan Carlos en representación de la monarquía española con la que rompieron los congresales en 1816, el presidente Mauricio Macri encabezó ayer en Tucumán la celebración del bicentenario de la independencia. “Deberían tener angustia de tomar la decisión, querido rey, de separarse de España”, imaginó en el pasaje más notable de su discurso.  Página 12, 10/07/2016.

El Presidente de la CEOcracia que nos (des)gobierna desde hace (recién!!) siete meses, nos ha dejado una frase que se encuentra en el ADN de este gobernante –no es el único- y de muchos argentinos.
Lo implícito de pensar la angustia de quienes declaran la Independencia de un país, revela el servilismo y la sumisión al gran capital financiero internacional, a los grandes grupos económicos multinacionales. Y también a los organismos internacionales como el FMI, BM, OMC, verdaderos centros de decisión y creación de políticas para defender, aplicar y acrecentar el gran capital mediante gobiernos democráticos o dictaduras.
La calidad o naturaleza de los gobiernos a ese supra poder mundial, no les interesa. Como canta Zitarrosa “sólo les importa el dinero porque es multinacional”.
Cuando P(i)rat(a) Gay les pidió perdón a los capitales españoles, o cuando fue raudamente a transar con los buitres, o cuando Macri le pedía apoyo (guerra sucia) a la embajada de EEUU diciendo que el PRO es “el primer partido de negocios” de la Argentina, demuestra que para la CEOcracia, es angustiante ser libres, independientes y soberanos.
El conjunto de medidas políticas que apunten básicamente al interés colectivo de una nación, de un pueblo, lleva a ser libres, independientes y soberanos.
Significa lograr el bien común, la realización plena como hombres y como pueblo.
Significa defender la soberanía e independencia  por el mandato popular -la democracia-  frente a los grandes grupos económicos y financieros que nunca son resultados de mandato popular alguno.
Mariano Moreno, Castelli, Güemes, San Martín, Bolívar y el enorme Artigas, no se sintieron angustiados por luchar y defender los intereses de los pueblos de todos los países que hoy forman la Patria Grande, América Latina.
Entregaron sus vidas para defender una decisión de ser libres, soberanos e independientes.
No hicieron terapia de grupo, tomaron una lanza, una espada y un cañón, crearon banderas, documentos políticos y enfrentaron a un poder que los sojuzgaba, exprimía sus recursos, mataba y condenaba a la miseria al pueblo.
Las monarquías de España y Portugal, financiaron el desarrollo de Europa con el oro y los recursos robados de América y también de África.
Después vinieron Inglaterra y EEUU que cumplen el mismo rol en el saqueo.
Hoy en día las naciones se metamorfosearon en intereses multinacionales, esos que representan el FMI, BM y OMC.
Usted Señor Presidente, que ejerce la máxima investidura pero que a mí como a tantos otros millones de Argentinos no nos representa, le rinde pleitesía al miembro de una monarquía que asesinó, repito asesinó, a millones de miembros de los pueblos originarios de toda América Latina.
¿A usted no le genera angustia que ningún mandatario latinoamericano lo haya acompañado en el festejo del Bicentenario de la Independencia?
¿A usted no le genera angustia un festejo tan significativo –Bicentenario de la Independencia- sin fervor popular, rodeado de vallas, con invitados que acceden mediante una pulsera electrónica?
A usted no le genera la más mínima angustia, más allá de sus pobres y vacíos discursos, la pérdida del poder adquisitivo de los salarios y las jubilaciones, la transferencia enorme de la riqueza desde los sectores medios y bajo hacia los sectores más concentrados de la economía, de los brutales tarifazos que obligan a apagar las estufas a gas y eléctricas en un invierno frío como pocos. 
No le genera angustia porque para eso está donde está junto a su séquito de CEOs.
¿Y si en vez de preocuparse por la pleitesía hacia el gran capital se preocupa por la profunda  angustia que hoy sí tiene la mayoría del pueblo Argentino?
La puede ver y sentir en las oficinas de las empresas de gas y electricidad, en los comedores de las Escuelas Públicas y de las organizaciones sociales y populares. En las oficinas de las municipalidades. En las colas de los colectivos y trenes. En las miles de caras de quienes reciben un telegrama anunciándole el despido. En las ollas populares de los cesanteados en las fábricas y PYMES que cierran por la devaluación y la apertura indiscriminada de importaciones.
Si realmente le preocupa la angustia de la gente que muchos forman parte de su caudal electoral, deje de lado el fácil e insustancial discurso de la pesada herencia, el presente dramático y el venturoso porvenir.
La historia de los gobiernos conservadores como el suyo, siempre plantearon lo mismo.
Festejaron el Centenario de la Independencia también con un miembro de la monarquía Española, la Infanta Isabel.
La historia de los pueblos, sus caminos y sus luchas, no sufren de angustia. Los mueven la construcción de una sociedad en donde sus derechos y reivindicaciones, se transformen en profundas libertades basadas en la soberanía política y la independencia económica.
Pero eso Presidente Macri, no está en su ADN.

viernes, 17 de junio de 2016

ACERCA DE LO(s)PEZ(citos)


El bochornoso episodio de José Lopez tirando valijas con plata por sobre las paredes de un convento, nos ha movilizado a todos los que adherimos de una u otra manera al significado político que los gobiernos de Nestor Kirchner y Cristina Fernandez de Kirchner generaron en los últimos doce años de la vida democrática Argentina.
La revalorización y defensa del  poder adquisitivo del salario por sobre la inflación, la protección y ampliación del mercado interno y del empleo mediante una política selectiva de las importaciones entre otras medidas.  La AUH, los diferentes tipos de planes sociales, el PROCREAR, el no endeudamiento con el usurero sistema financiero internacional, el alineamiento con la Patria Grande latinoamericana por sobre los intereses imperiales de EEUU,  hicieron que como un trabajador más (sector social con quien me identifico por mis ingresos) pudiera pagar los impuestos, las tarifas de los privatizados servicios públicos, pensar y concretar algunos viajes y comprarme un pequeño auto. Pero también armarme un mediano ingreso para pensar a mis 61 años, una vejez por lo menos digna para mí y mi compañera de vida, no más que eso.  Me-nos permitieron soñar. ¿Básico no? ¿Tengo o no derecho a estos “beneficios”, a esos sueños?
 Según escuché a varios referentes de la soberbia arrogante de la clases sociales dominantes, no.
Formo parte (según ese discurso racista y discriminador) de los “cabecitas negras”, de los ciudadanos de segunda que sólo podemos aspirar a tener un sueldo que te permita durante toda la vida laboral pagarte la comida, el boleto de ida y vuelta al trabajo.  Con suerte,  si podes comprarte ladrillos a veces  ir armándote un casita, y con algunas changas comprarte el autito antiguo y la ropa y el calzado para ir a trabajar.
En definitiva la recreación de la plusvalía. La acumulación del capital, es sólo para los dueños del capital en el sistema capitalista de siempre, neo-liberal o no.
El peronismo del  45, del 73 y el kirchnerismo, mal que les pese a sus detractores,  modificó esa lógica perversa del capitalismo, revalorizó siempre el salario por sobre las enormes ganancias del capital, le dio derechos a los trabajadores, no privilegios y caridad.  Equilibró y redistribuyó el reparto de esas ganancias y produjo una movilidad social ascendente, efecto social y económico, que siempre a los sectores altos de la sociedad le produjo urticarias.
Por eso ahora te dicen que no teníamos derechos, que vivíamos en una fantasía, en un sueño.
Dentro de ese proyecto, de esa forma de hacer política para reivindicar y revalorizar la vida de millones de personas, de los miles de funcionarios abocados a implementar esas políticas, un puñado de corruptos movidos solamente por la ambición, la codicia material, la acumulación del capital, no deslegitiman las ideas y los principios, las utopías, de como pensar y ejecutar políticas para que todos, los empresarios grandes y chicos, los profesionales, los trabajadores, los jubilados, vivamos mejor, tengamos sueños y derechos.
A esta altura (por las dudas) ratifico la crítica profunda a la corrupción de la política, ¿queda claro no?.
Igual pregunto ingenuamente,  ¿por qué no se sacó a tiempo la manzana podrida del cajón?
Para que el cajón de manzanas todo –El Proyecto- no se pudra.
Igualmente, y sin ánimo (de nuevo!) de justificar ni minimizar el caso Lopez, debo decir que la corrupción se da en los gobiernos de izquierda y de derecha. 
El PP en España tiene varios casos y algunos presos. El PT en Brasil también, pero salvo Dilma y Lula, los más comprometidos hoy están en el gobierno actual, y otros, entre ellos Cunha,  tuvieron que renunciar.
Desde hace tiempo pienso como varios, que la corrupción es inherente al sistema capitalista.
Dirán que en la vieja URSS y en China existieron y existen casos de corrupción.
Pero hace un tiempo atrás, uno de los principales jefes del narcotráfico colombiano apareció en la lista de los diez hombres más ricos del mundo difundida por una revista internacional  que se dedica a difundir la ostentación de la riqueza,  en un mundo donde millones de personas viven en la pobreza extrema y se mueren a causa de ella.
Es corrupción socialmente aceptada, un modelo a seguir para varios.
Las guaridas fiscales -antiguos puertos donde los piratas escondían sus botines- fueron creadas por el sistema capitalista para "enterrar" dentro de una difusa y cuestionable legalidad, los grandes botines cosechados por los prohombres de todo el mundo producto de las evasiones impositivas,  negocios ilegales de venta de drogas y armas y también los vueltos de la corrupción.
Voy a decir una obviedad que de tan obvio no siempre se dice públicamente, un funcionario recibe una coima pero la otra pata necesaria de la coima, de la que poco se habla, es que un empresario  mediante esa prebenda  consiguió un contrato, hizo una obra, un camino, una represa,  o vendió un producto.
Hace muchos años trabajando para Clarín, me tocó cubrir fotográficamente, las sesiones del Concejo Deliberante de Morón. Allí, un joven edil,  desconocido a nivel nacional,  Martin Sabatella, de manera vibrante y valiente denunciaba la corrupción del Intendente Juan Carlos Roussellot.  El Intendente renunció y creo que estuvo detenido.
Quién fue beneficiado por un contrato millonario que cobró para el tendido de las cloacas pero que nunca se realizaron, era un joven empresario llamado Mauricio Macri.
Siguió su vida como empresario y haciendo negocios (algunos turbios)  ganando plata y poder, por el contrabando de autos fue procesado,  condenado y absuelto por la corte menemista.
 Después estafó al Estado con la licitación del Correo Argentino.
 ¿Esto no es corrupción? Parece que para el 51% del electorado no.
También es corrupción la estatización de la deuda externa que en el fin de la dictadura cívico militar, un desconocido Domingo Cavallo transfirió desde los grandes grupos económicos de ese momento al Estado Nacional, para que todos termináramos pagando el festival del endeudamiento externo privado. 
El Grupo Macri –entre otros- fue el beneficiario de esta transferencia brutal de plata, ¿esto no es corrupción?.
El actual Presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger está procesado por las comisiones millonarias durante el Megacanje de la Alianza, ¿esto no es corrupción?
Comprar dólares a futuro, ser funcionario actualmente y beneficiarse mediante la devaluación hecha por el gobierno que integra,  ¿no es corrupción?
Comprar gas a Chile al doble de lo que lo vende Bolivia, y que el proveedor del gas sea Shell, de quién Aranguren era el presidente y hoy conserva una cifra millonaria en acciones ¿no es corrupción?
Tener cuentas en guaridas fiscales para evitar pagar impuestos en la Argentina, ¿no es corrupción?
La historia de las grandes fortunas, no están hechas sólo con la plusavlía, con el trabajo de otros, también está hecha con la corrupción.  La obra pública es el espacio ideal para la corrupción no solo en la Argentina, hace años que venimos escuchando los negocios de la Patria Contratista.
¿Cuáles son los nombres de las primeras veinte empresas beneficiadas con la enorme obra pública de los últimos doce años?
La plata de las valijas de Lo(s)pez(citos), salieron de estas grandes empresas “a quienes les interesa el país” como decía en los noventa uno de los presentadores de Tiempo Nuevo, para sostener desde la pantalla chica el incipiente fenómeno del neo-liberalismo menemista de los noventa. El desguace del Estado Nacional para entregárselo a los mismos grupos económicos de siempre.
Pasó la dictadura, pasó el menemismo y pasó la Alianza, pasó el kirchnerismo, pero los grupos económicos, reagrupados de otra manera o parecida, siguieron generando brutales ganancias, muchas de ellas mediantes coimas y sobreprecios.
 Los políticos pasaron y algunos fueron presos, pero los empresarios y sus grupos siguieron creciendo.
Pero el desgaste y el costo de este sistema de hacer negocios y de la corrupción, lo hace la política, quienes estuvieron detenidos fueron los políticos.
Y este es el gran objetivo del poder económico, desgastar la política para dominarla y sojuzgarla, sacarle mediante el descrédito la mayor ganancia, la mayor prebenda posible, hacernos creer que la política no sirve y que sus CEOS deben conducir un país como una gran empresa, sólo negocios sin importar la gente, esa que empodera la política.
¿Cómo hizo Clarín para quedarse con Papel Prensa? Mediante la tortura en un centro de detención clandestino. ¿Cómo consiguió la Ley de Bienes Culturales? Chantajeando a Duhalde.
Lo(s)pez(citos), le hace un tremendo daño a la política, a los miles de jóvenes que se sintieron nuevamente atraídos por un discurso y una épica sólo comparable a los fogosos 60/70. También a quienes nunca creímos que las ideologías habían muerto y volvimos a identificarnos con los principios políticos que siempre sostuvimos para conseguir una sociedad más justa, más independiente, más libre, más soberana.
Lo(s)pez(citos), nos cachetea, nos desarma. 
Cuando el rompecabezas se desarma y vuelan las piezas, hay que juntarlas, mirarlas, mirarse y volver a empezar a buscar los encastres y los lados correctos.
Mientras tanto, la democracia liberal, la formal, la republicana, la practicada por el poder económico y financiero vernáculo y de afuera, al igual que una garrapata, te saca gran parte de lo conseguido.
Para quitarte los derechos y los sueños, la devaluación y la apertura de las importaciones, los tarifazos de la luz, el gas y  el agua, la quita de los subsidios al transporte, el aumento de la nafta, la quita del impuesto a los bienes personales, la modificación en ciernes del sistema previsional, la limitación del derecho de huelga, hacen que la trasferencia desde los sectores asalariados hacia los grandes grupos económicos concentrados  sea varias veces millonaria.
Al igual que la fuga de capitales al exterior (ahora sin cepo) para nutrir las cuentas de las guaridas fiscales.
Lo de Lo(s)pez(citos) es tan burdo, tan grotesco, tan de película berreta de Hollywood, que nadie puede creer que un tipo que estuvo en el poder doce años, tenga nueve palos verdes en su casa como si se los hubiera afanado ayer,  y los lleva a un convento a las tres de la mañana solo y con un arma de guerra.
 ¿Un tipo capaz de armar una forma de corrupción tan grande, nunca  pudo pensar donde esconderla que la tiene que tirar por encima de una pared?
 ¿En cinco meses que dejó el poder nadie le sugirió tomarse un avión y llevarla afuera?
¿Qué tremenda operación política se está armando para blanquear la corrupción sistemática de la política y su financiamiento?
Que el árbol no tape el bosque……..


viernes, 30 de octubre de 2015

FRENTE AL 22 DE NOVIEMBRE

Quizás para algunos, suene tremendista escuchar o leer que estamos frente a una coyuntura histórica, pero es la realidad. El 22 de noviembre se elige entre dos modelos o proyectos políticos. Uno  va a consolidar y profundizar lo iniciado hace 12 años, y el otro desde la vereda de enfrente, se apresta a desarmar todo lo hecho y regresar en una suerte de tren fantasma, hacia la oscura  y tremenda etapa vivida por muchos de nosotros con el neo-liberalismo de los años 90.
Por eso me gustaría preguntarle a aquellos que ya votaron a Macri o piensan hacerlo, si realmente saben que intereses económicos y políticos representa el frente Cambiemos.
El equipo de economistas del partido de Mauricio Macri, no aparece en la campaña porque son impresentables. Carlos Melconian, José Luis Espert, Miguel Ángel Broda, Federico Sturzenegger, Daniel Marx y Llach entre otros, formaron parte del equipo de Domingo Cavallo en los años 90 y luego en el gobierno de la Alianza que terminó en la crisis terminal del 2001.
¿Qué significaron las políticas económicas neo-liberales de los años 90?En primer lugar, significó la privatización de todas las empresas estatales sean de servicios públicos, transporte, producción de materias primas, siderúrgicas, enregéticas y petroleras que manejaba el Estado Nacional, y que daba trabajo a millones de personas.Ferrocarriles Argentinos, YPF, Aerolíneas Argentinas, Entel, Gas del Estado, OSN, Somisa, ELMA, entre tantas otras cientas, pasaron a formar parte de empresas privadas que dejaron de tener como eje el servicio público como bién social, a ser solamente objeto de lucro y ganancia, sin importar la tarifa y el servicio.Así desaparecieron los trenes de FFAA que unían pueblos perdidos en el enorme territorio argentino. También los barcos de ELMA que llevaban mercaderías a otros países del mundo, y los de Flota Fluvial que recorrían los ríos del país. Los aviones de AA, dejaron de ir a las pequeñas ciudades del interior porque los destinos no eran rentables. Las reservas petroleras de YPF descendieron a niveles bajísmos, porque era más rentable extraer y vender, que explorar nuevas cuencas. Las nuevas redes de gas y agua tenían que pagarlas los vecinos, porque esos servicios básicos pasaron a ser un negocio, no un servicio público como lo era con Gas del Estado y OSN. Se implementaron los peajes en las Rutas Nacionales y Provinciales, el tránsito por ellas pasó a ser un negocio para unas pocas empresas.Todo pasó a formar parte de la lógica del lucro y la ganancia. La personas dejamos de ser tales para pasar a ser objetos de consumo.Pero también se abrieron las puertas a los productos importados, que a precios muy bajos por el dólar barato inundaron los negocios de todo el país. Los carteles de los comercios del “TODO X DOS PESOS”, fueron el anuncio mortal de la destrucción de miles, sí miles, de pequeñas empresas, pequeños talleres donde se fabricaban productos de todo tipo que fueron remplazados por los importados.Toda esta tremenda transformación social y económica produjo millones, si millones, de desocupados, pero también millones de subocupados. Además se flexibilizaron las condiciones del trabajo formal, haciendo que las empresas pagaran sueldos muy bajos, y que los derechos sociales como la jubilación y las obras sociales dejaron de ser eso, un derecho, y también se privatizaron. La jubilación pasó a ser un brutal negocio para unas pocas empresas privadas mediante la formación de las AFJP.La paritarias, o sea las negociaciones colectivas de trabajo entre las empresas y los empleados dejaron de hacerse, y el sueldo lo tenías que negociar vos mismo con tu empleador.La convertibilidad posibilitaba la paridad uno a uno del peso con el dólar, pero para sostenerla, se pidieron miles de millones de dólares de deuda a los organismos financieros mundiales. El FMI y el banco Mundial, enviaban periódicamente misiones para fiscalizar que las políticas de privatizaciones, despidos, desaparición de todos los planes sociales de parte del estado y la  flexibilización laboral se cumplieran a rajatabla.La concentración económica fue brutal, grandes y pocos grupos económicos pasaron a controlar la producción, comercialización y distribución de los sectores fundamentales de la economía argentina, (petróleo, comunicaciones, electricidad, gas y agua). Pero también el comercio exterior, el transporte de carga y pasajeros, la salud, le educación, las jubilaciones. Todo era un negocio, y lo manejaban sin controles, sin competencia, los precios se fijaban entre pocos, la única lógica era tener enormes, millonarias ganancias, y las tuvieron sin límites.La deuda externa, llegó a U$S 144 mil millones de dólares, el 149% del PBI, sabés lo que significa eso? Significa que durante dos años tenés que darle absolutamente todo lo que un país produce para pagarle a los organismos financieros internacionales.Los préstamos que se pedían al exterior sólo servían para hacer un pase contable para pagar deudas anteriores, pero además de generar nueva deuda, les daba jugosas comisiones a quienes implementaban, gestionaban y sostenían desde lo político y lo comunicacional el sistema económico de la época.La desocupación llegó al 25%, o sea uno de cada cuatro ciudadanos estaba sin trabajo.Este perverso sistema económico aplicado en los 90, generó millonarias ganancias a unos pocos privilegiados. Pero millones de personas quedaron afuera del sistema, sin derechos ni recursos básicos y elementales para vivir dignamente.Los economistas de Cambiemos que te mencioné más arriba, formaron parte de la ejecución de la política económica que nos llevó a la crisis tremenda del 2001. Durante los años 90 se ejecutó el proceso destructivo de un sistema económico y político que se basaba en el bienestar de todos. La modernización argumentada en la época, significó la concentración de la economía en grandes grupos económicos con ganancias millonarias para pocos y expulsión de millones de argentinos afuera del sistema. La crisis no salió de un repollo, alguien la generó. La eclosión del 2001 fue la consecuencia de la indigencia y la desocupación.La estructura social destruida sistemáticamente durante los años 90 fue reconstruida pacientemente a partir del 2003, podemos discutir la forma de hacerlo, pero de algo estoy seguro, no quiero volver a los oscuros años del neo-liberalismo en la Argentina.Si sos joven y no lo viviste, preguntale a tus viejos, a tu profesor, hay mucha información al respecto. Si no sos joven, ejercitá la memoria.Macri es un zorro debajo de la piel de cordero. Desde que empezó su ambiciosa carrera política defendió estas políticas que te conté como destruyeron un país, el tuyo y el mío.Las defendió desde el discurso pero también desde su espacio político, con los diputados y senadores oponiéndose sistemáticamente en sus labores parlamentarias a la reconstrucción de la trama social destruida durante años. Es mentira que va a sostener lo que se hizo hasta ahora. Cuando te dice que va a implementar un sistema unificado del valor del dólar, significa que va a permitir una enorme devaluación para que los grandes grupos económicos y los exportadores, se beneficien millonariamente y paguen muy barato sus enormes deudas en pesos.Pero tu sueldo va a verse reducido igual que el porcentaje de la devaluación, porque la luz, el gas, la nafta y todo lo que compres va a subir igual que la devaluación, pero vos vas a seguir ganando lo mismo en pesos.Rodeado de globos de colores le habla a la sociedad con palabras vagas, superficiales, lindas, pero carentes de sentido, como un pastor de buenas ondas megáfono en mano en la plaza de tu barrio. Como la propaganda de una gaseosa que te llevará a la felicidad burbujeante.Cambiemos, es lo más parecido a los espejitos de colores que los colonizadores españoles les daban a los nativos para luego llevarse el oro de las entrañas americanas.Querés eso para tu futuro? Querés volver a la época de los 90 hasta el 2001 que te conté?

De a quién votes el 22, depende tu futuro y el de los otros millones de personas que vivimos en la Argentina!